jueves, 28 de enero de 2010

Sufjan Stevens invites you to: Come On Feel The Illinoise


Al terminar 2009, las revistas especializadas y páginas webs músicales comenzaron a publicar rankings con lo mejor del año que termina. Rockdelux ha sido más ambiciosa que las demás y ha publicado un monógrafico sobre la década que, según ellos, termina en 2009. Yo no me quejo, si se han equivocado lo han hecho para bien, así no tengo que esperar un año para hojear monográficos tan interesantes como el que esta revista ha sacado al mercado con una presentación tan cuidada. Muchos dicen que la década termina en 2010, otros (una minoría) en 2009... supongo que la discusión está en si hablamos del año cero como un comienzo o un fin. El caso es que este álbum de Sufjan Stevens aparece como el número 2 de la lista de los mejores álbumes internacionales de la década. Junto al artículo sobre el disco aparecía una foto del susodicho (tenía cara de buena persona) y la palabra pop aparecía varias veces en el texto. Así que en lugar de comenzar a escuchar a partir del nº 1 como está mandado, decidí atreverme primero con el segundó en discordia. Creo que no me he equivocado, porque Illinoise, un álbum publicado en 2005, se está convirtiendo en mi primer disco de cabecera para el año que ya hemos comenzado.

Illinoise es el segundo trabajo del irónico proyecto que Sufjan Stevens tiene pensado: publicar un album por cada uno de los cincuenta estados que componen los EEUU. Y digo irónico, porque al ritmo que va, necesitará tres o cuatro vidas para llevarlo a cabo. En 2003 publicó el primer álbum de la serie, dedicado por supuesto al estado donde nació, Michigan. En 2005 publica el álbum del que estamos hablando, Illinoise... y desde entonces, el hipótetico proyecto no ha continuado. Lo más parecido, un disco de outtakes y canciones no publicadas de las sesiones de Illinoise llamado The Avalanche. Para mí ha sido una agradable sorpresa descubrir un disco tan positivo y lleno de vitalidad pop. Escuchar Illinoise es embarcarse en un viaje donde cada parada está repleta de deliciosas melodias. Ojalá nos esperaran aún 48 entregas de semejante nivel con títulos como Indiana, Wisconsin o Kentucky. A lo mejor por eso habla entre sonrisas de ese proyecto imposible que nunca llegará a realizar. Viendo el gran álbum que ha sido Illinoise, resulta al menos esperanzador soñar con tanta buena música que podría aguardarnos en el caso de que se realizara.

A pesar de ser un disco extenso y ambicioso que cuenta con veintidós temas (de los cuales varios de ellos guardan giros melódicos y sorprendentes finales), Illinoise es una obra de arte de principio a fin. Resulta difícil encontrar a día de hoy un disco tan largo que aún pueda decir algo original usando como arma el desgastado pop del siglo XXI. El álbum alcanza para mí su mejor momento hacia la mitad, ya que entre los cortes cinco y quince se suceden sin tregua los mejores temas del álbum. Curioso también que la mejor canción esté situada casi justamente en el centro, Michigan. Podría intentar enumerar las canciones que más me han gustado, pero otra de las características de este álbum es que los títulos son demasiado largos. A modo de ejemplo, recomiendo en especial la escucha de Decatur, or, Round of Applause for Your Stepmother! o A Conjunction of Drones Simulating the Way in Which Sufjan Stevens Has an Existential Crisis in the Great Godfrey Maze. Para seguir disfrutando de la música de este hombre, tengo pensado escuchar el álbum de descartes ya mencionado, The Avalanche: Outtakes & Extras from the Illinois Album y aquel primer disco que iniciaba el proyecto, Greetings from Michigan: The Great Lake State.


PD: Que bien me han venido títulos tan largos para abultar el post XD

3 comentarios:

Kinezoe dijo...

Antes de hablar del disco permíteme, Manu, un pequeño inciso que nada tiene que ver con la recomendación musical:

Lo de los años es bien sencillo, como el año cero nunca existió, sino que pasamos del año 1 a.C. al año 1 d.C., la primera década de nuestra era fue la que comprendía desde el 1 de enero del año 1 hasta el 31 de diciembre del año 10, comenzando pues la segunda década en el año 11, y así sucesivamente hasta nuestros días.

Por tanto, se podría decir que el comienzo de cada nueva década, siglo o milenio ha de producirse necesariamente en un año cuyo primer dígito comenzando por la derecha (es decir, las unidades) sea siempre un "1". Recuerdo ahora la gran controversia que hubo en torno al cambio de milenio... Jeje... Y hasta el 2001 no se entró en el tercer milenio!!...

Esto es lo estrictamente formal, luego, cada uno es libre de tomar el periodo de 10 años como guste. Reconozco que soy algo puntilloso en este asunto: siempre que surge el tema aprovecho para aclararlo, no puedo evitarlo ;-)


== o ==


Y ahora ya sí, en cuanto a la música que nos ocupa, que es lo verdaderamente importante, decirte que conocía este grupo por un amigo que tuve -y hablo en pasado porque le perdí la pista hace unos años- muy aficionado al panorama independiente, tanto cinematográfico como musical. Trabajaba, y no sé si aún lo hará, en Green Ufos y se llama Santiago Cotes; era el encargado de promoción o algo así.

Recuerdo que me sorprendió gratamente aquella recomendación que me hizo cierto día, ese primer álbum titulado Michigan. Repasando ahora su tracklisting logré recordar que la canción que más me gustaba era "Romulus".

De Illinoise no tenía conocimiento; ya estoy yo más alejado de todo este tipo de música (aunque siempre abierto a recomendaciones...). Por la canción que colgaste diría que Sufjan Stevens siguen muy en su onda. Me gusta. Que usted lo disfrute! ;-).

Saludos.

Manuel J dijo...

Vaya, me ha sorprendido eso de que el año cero nunca existió. Nunca me lo había planteado. A lo mejor por eso del supuesto cambio de milenio en el 2000, los de Rockdelux se han tomado la licencia de hacer el repaso de la década un año antes. Así además, se adelantan a los demás y venden revistas que te cagas.

Pues yo no conocía a Sufjan Stevens hasta hace poco más de un mes. Después de Illinoise, haré lo de siempre... intentaré escuchar toda su discografía y una de mis prioridades será ese álbum llamado Michigan que, según allmusic, es mejor que el que acabo de comentar. Ya veremos ;)

Kinezoe dijo...

Pues sí, es una mezcla de marketing y desconocimiento la que conduce a este tipo de iniciativas. Por cierto, hablando de revistas: la publicación Año Cero debe su nombre precisamente a eso, a algo que no existió. Quizá por eso mismo se dedican también a tratar temas de una más que dudosa existencia... Jeje...